La llama Olímpica de los Juegos Olímpicos de Invierno ha comenzado su épico viaje de 45.000 kilómetros por Canadá y el doble medallista Olímpico de triatlón Simon Whitfield junto con la patinadora de velocidad Catriona Le May Doan encendieron la antorcha en frente de la Asamblea de la Columbia Británica después de su llegada desde Grecia y de haber recorrido la primera fase del relevo por el Victoria’s Inner Harbour.
Whitfield, que reside y entrena en Victoria, en el Centro de Alto Rendimiento del Triatlón Canadiense, era un candidato claro para el Comité Organizador a pesar de ser una estrella de los Juegos Olímpicos de verano. Después de haber impulsado a su país con resultados impresionantes tanto en Sídney y Beijing, la leyenda del triatlón es una cara familiar en la comunidad de Victoria, en la Isla de Vancouver tras mudarse allí desde su Ontario natal. Su identidad como portador de la antorcha había sido un secreto bien guardado de cara a la ceremonia, sin embargo su aparición no ha sido una sorpresa para muchos de los habitantes locales que se lanzaron a las calles para dar la bienvenida de la antorcha a Canadá.
Vestidos con un chándal blanco con detalles azules y toques blancos, Le May Doan y Whitfiled bajaron por la pradera del parlamento, manteniendo la antorcha en sus mitones rojos y corrieron a través de la multitud. Luego cedieron la antorcha Olímpica el remero Olímpico Silken Laumann y al saltador Olímpico Alexandre Despatie. Whitfield dijo: “Cuando empecé a correr es cuando realmente me impactó, porque yo tenía esa imagen en mi cabeza cuando vi con mis padres, a la gente portando el relevo de la antorcha en Calgary.
La llama llegó a Victoria después de lo previsto, debido al retraso del vuelo por la climatología desde Atenas a Canadá. Aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Canadá a las 8:42 am y pronto salió a las escalinatas del avión el Alcalde de Vancouver Gregor Robertson, para enseñarla a la multitud que estaba esperando. A continuación, fue llevada al Puerto Inner Harbour, a bordo de una canoa First Nations. La llama salvaguardada en una linterna de minero, fue sostenida por un jefe. Como las canoas eran empujadas hasta el muelle, los más ancianos pidieron permiso a los Songhees y a los Esquimales Pioneros para traer la antorcha a tierra. Con tambores y cantando los ancianos caminaban con la antorcha hasta el Parlamento para la ceremonia de bienvenida.
Miles de personas, muchas con banderas canadienses, se dieron cita en un día gris y lluvioso en la pradera de la asamblea para dar la bienvenida a la antorcha y ver a a los primeros portadores llevar la llama por las calles de Victoria. En el momento que la llama llegue a Vancouver el 12 de Febrero, habrá sido portada durante 28.000 millas, por más de 12.000 personas.
Whitfield comentó que his blog todos los atletas participantes estaban un poco nerviosos y haciendo un montón de bromas con el tema de que “¡hagas lo que hagas, no la dejes caer!”, y continuada en twitter con: “guau, la antorcha está encendida, es asombroso ver a todos los niños que disfrutando de aquella experiencia inolvidable en la que la antorcha comenzaba a cruzar toda Canadá.”
Historia Original de Dentro de los Juegos