Flora Duffy (BER) se adjudicó el Triatlón Mundial Columbia Threadneedle 2017 en Leeds, sumando así un cuarto triunfo en la SMT, el segundo consecutivo de esta temporada.

Flora salió del agua entre las punteras para luego unirse a un pequeño y feroz pelotón líder que trabajó a la par para obtener una ventaja considerable. Así, Duffy enfrentó la etapa pedestre con la clara posibilidad de quedarse con la victoria. Este fue su segundo triunfo de la temporada y mejoró su actuación de Leeds 2016, cuando fue medalla de plata. De esta manera, Flora solidifica su camino a un segundo título de Campeona Mundial.

Duffy dijo del desarrollo de la carrera, “Salí del agua en una buena posición, y por suerte, las chicas trabajaron junto a mí en la parte en bicicleta, quizás lo hicieron porque si pedaleas bien tienes más posibilidades de llegar al podio. La verdad es que juntas hicimos mucha diferencia y bueno, fue fantástico. Este fue el primer podio para Taylor (Spivey) y para Alice (Betto), así que estoy muy feliz por ellas.”

“El grupo tuvo el número ideal; cuatro, especialmente porque el circuito es muy técnico y si el grupo es así de pequeño, se va más rápido cuando llegas a las esquinas, eres más eficiente. Las chicas pedalearon muy bien, fueron muy técnicas y ayudaron a la velocidad. Gradualmente pusimos más y más distancia entre nosotras y las que venían detrás,” dijo sobre su grupo en la etapa de ciclismo. “Obviamente ese es tu objetivo para cada carrera, y sí, pude ganar las dos primeras y estoy muy feliz. De hecho fue una sorpresa que pienso disfrutar.”

Taylor Spivey (USA) y Alice Betto (ITA) ganaron sus primeras medallas de la Serie en Leeds Spivey fue plata, como también lo fuera en la copa Mundo de Madrid hace unas pocas semanas. Taylor es la séptima atleta de los EEUU en llegar a un podio de la SMT.

“Estoy extasiada, realmente no me lo esperaba. Estoy tan feliz de que mi trabajo haya rendido frutos,” Spivey dijo. “Creo que haber estado ahí en el frente junto a Flora fue clave, es que ella es tan fuerte, técnicamente es increíble. Tuve que presionarme para poder mantenerme junto a ella porque no tengo su fortaleza ni su capacidad, pero ¡estoy tan feliz de haber podido hacerlo!”

El día estaba nublado y fresco cuando las mujeres largaron en Leeds, y vistiendo sus trajes de neopreno se zambulleron desde el pontón para nadar por 1500 metros. Desde el comienzo, la británica Jessica se ubicó al frente. En las dos vueltas en el agua se abrió una brecha entre las nadadoras y Learmonth llegó primera a la T1, seguida de cerca por muy pocas mujeres.

Duffy salió del agua segundos después que Learmonth, lo que la posicionó de manera ideal para comenzar a pedalear.

Inmediatamente, un pequeño grupo de mujeres se les sumaron, pero como Learmonth aminoró para esperar a su compatriota Non Stanford, el grupo quedó en cuatro ciclistas.

Las cuatro punteras, Duffy, Spivey, Betto y Maya Kingma (NED) presionaron, especialmente las tres novatas que se esforzaron por mantener la marcha de la maestra Duffy. Sin embargo, todas lograron trabajar bien juntas y ganaron una ventaja considerable.

En el segundo pelotón veíamos figuras como Learmonth, Stanford, Gillian Backhouse (AUS) y Kirsten Kasper (USA), pero a pesar de los grandes esfuerzos, la diferencia se mantuvo.

La australiana Ashleigh Gentle, una de las favoritas para la carrera, se encontraba en el segundo grupo de perseguidoras que pedaleaba minutos detrás y quedaba sin posibilidades de ganar medalla.

Las cuatro punteras aumentaron la ventaja y llegaron a la vuelta de campana con un margen a favor de 2:30.

Luego de hacer la transición, Duffy salió a correr sin perder tiempo y sin mirar atrás. Su capacidad en la bicicleta la catapultó a una posición perfecta para poder pasar a sus compañeras de la etapa de ciclismo, cuya menor experiencia se hizo notar en esta última disciplina. Si bien había corredoras temibles entre las perseguidoras, Duffy corría con tanta ventaja que nadie le impediría quedarse con el oro.

Todo el trabajo de la etapa de ciclismo fue evidente para las otras tres integrantes del pelotón líder. Spivey y Betto salieron a toda máquina en un intento de subir a su primer podio de la Serie, sueño que se cumplió para ambas. Betto tuvo que cumplir una pena de 15 segundos por desmontar su bicicleta tarde en la T2, pero la ventaja que tenía le fue favorable y así ganó el bronce. Betto es la primera atleta –hombre o mujer- de su país en haber llegado al podio de la SMT.

“No lo podía creer porque es mi primer podio. Esta carrera fue perfecta para mí, nadé muy bien, y en la bicicleta presionamos mucho. Sé que no soy muy buena corriendo a pie, pero igual lo intenté,” dijo Betto. “Estaba tan nerviosa por la pena, porque esta fue la segunda vez que me pasa, la primera fue en Yokohama y ahora otra vez…me sentía muy enojada conmigo.”