La bermudeña Flora Duffy descolló con la bicicleta en el calor y humedad de Cozumel, para ganar la carrera y hacer historia al convertirse en Campeona de la Serie Mundial ITU 2016. Esta es la primera corona mundial de la SMT para Duffy, y también para Bermuda.
Duffy llegó a Cozumel en el número uno del Ranking Columbia Threadneedle, aunque solo por 166 puntos. De este modo, Duffy necesitaba vencer a la campeona olímpica Gwen Jorgensen (USA) o secundarla, tarea difícil considerando que Jorgensen perdió dos carreras nada más en estos dos años.
Pero una arremetida en bicicleta de la atleta de Bermuda hizo que pusiera pie en el pavimento con una brecha tan amplia que sería prácticamente imposible que Jorgensen y compañía pudieran alcanzarla.
“En este momento no tengo palabras,” dijo Duffy. “No tengo idea de cómo pasó. Siempre deseas el día perfecto. Entrenas para ese día y llegó cuando lo necesitaba.”
Jorgensen corrió al frente del resto de las competidoras para llegar segunda y también quedar segunda en el Ranking Columbia Threadneedle. El bronce fue para Charlotte McSchane (AUS), compañera de entrenamiento de Jorgensen, quien cerró la temporada con su primera medalla de la SMT. La japonesa Ai Ueda llegó quinta, suficiente para la tercera colocación en el ranking general. Este logro representa el mejor resultado obtenido por un atleta de Japón en la SMT.
‘“Flora hizo una carrera excelente,” dijo Jorgensen. “Fue mejor que yo, este es un gran triunfo para ella, básicamente lideró desde el principio.”
Aguas muy claras esperaban por las mujeres, primer grupo de atletas elite es disputarse el título mundial. La etapa de natación de 1500 metros, sumado a la corriente del océano, propició la formación de una larga hilera de nadadoras. Siete mujeres pudieron hacer una pequeña diferencia; las británicas Jessica Learmonth y Lucy Hall junto a Duffy, Jorgensen, Sarah True (USA), Carolina Routier (ESP), y Pamella Oliveira (BRA).
Al salir del agua, Duffy, Learmonth y Hall superaban a Jorgensen por cinco segundos. Este tiempo fue suficiente para que las tres presionaran en la bicicleta y no pudieran ser alcanzadas. Jorgensen fue la quinta en dejar el agua pese a lo cual no logró ubicarse en el primer pelotón por lo que lo siguió formando trío con True y Routier.
Un grupo de trece ciclistas a cargo de las tres atletas olímpicas de Gran Bretaña, Vicky Holland, Non Stanford y Helen Jenkins llegaron hasta Jorgensen para crear un nuevo segundo pelotón de 17 mujeres.
Duffy es famosa por ser una de las ciclistas más poderosas del circuito, y en esta disciplina necesitaba hacer la mayor diferencia si quería ganar el título. En esta oportunidad trabajó con Learmonth y Hall, entre las tres aumentaron la diferencia vuelta tras vuelta. A mitad del recorrido, la brecha era de 42 segundos y al final del segmento ascendía a casi un minuto.
“Fue un día completamente distinto (con Learmonth y Hall),” dijo Duffy. “Montamos las bicicletas y les pregunté si trabajarían, y sí, aceptaron y nos turnamos. Trabajar con ellas fue fabuloso. Agradezco mucho su ayuda.”
En la segunda transición, Duffy dejó a Learmonth y Hall seguir por sí mismas.
Las perseguidoras ingresaron a la T2 con 1:07 de desventaja, Jorgensen tenía un gran trabajo por delante para llegar hasta Duffy. Pero como lo ha hecho tantas veces con anterioridad - en Leeds Duffy superaba a Jorgensen por 90 segundos y aún así ganó la carrera- cuando pisó el pavimento comenzó a intentar achicar. Sin embargo, a mitad del trayecto, Duffy aún tenía 1:07 de ventaja y cuando sonó la campana, la diferencia había subido a 1:14.
Jorgensen es demoledora a pie, pero hoy el día fue de Duffy. La americana pasó al resto pero no pudo llegar hasta Duffy, quien ingresó inalcanzable a la recta final. Con tiempo a su favor, la bermudeña aprovechó para tomar la bandera de su país, chocar los cinco con seguidores y finalmente cruzar la meta para quedarse con su segunda victoria del año y primer título mundial.
“Yo sabía que Gwen iba a venir a pesar del minuto que le llevaba, pensé que necesitaba llegar a los 5k antes de que me pasara,” dijo Duffy. “Sabía que podía quedarme con Helen y Charlotte porque si Gwen me pasaba, necesitaría ser segunda. Y cuando todavía tenía un minuto de ventaja solo pensé en seguir corriendo.”
El segundo lugar fue para Jorgensen, que cruzó la meta 1:17 después que Duffy. Jorgensen sumó suficientes puntos para mantener la segunda colocación en el ranking general.
El bronce se definió en un sprint entre McShane y Jenkins quienes ingresaron juntas a la recta final. McShane superó a Jenkins y ganó su primera medalla en la SMT.
McShane manifestó acerca del bronce, “Creo que más que nada estuve relajada. Fue un año difícil en lo personal, con menos puntos altos que bajos. Ni siquiera sabía si quería terminar la temporada, quería volver a casa. Hace unas semanas pensé en darme una última oportunidad. Estaba más descansada que muchas de las chicas y lo quise aprovechar, ver qué podía hacer.”
A lo largo del recorrido se dieron algunos hechos desafortunados que obligaron a abandonar la competencia a algunas atletas reconocidas. La gran Emma Moffatt (AUS), bicampeona mundial, pinchó una cubierta en la primera vuelta y abandonó la carrera. Este resultado es el último en la carrera de la atleta que a principios de semana anunció que se retiraba de la competencia.
Holland también tuvo un día complicado. Un pequeño choque con la neozelandesa Nicky Samuels la obligó a dejar la competencia.